Esta es la tarta perfecta para todo aquel amante del after eight. Esta receta veréis una forma perfecta de hacer bizcochos de chocolate super jugosos, que con la combinación de la menta es todo una delicia.
La menta le da un toque fresco a esta perfecta combinación de sabores.
Ingredientes:
Para el bizcocho:
- 180 g de harina de trigo
- 2 Huevos L
- 120 ml de aceite de oliva suave
- 280 g de azúcar
- 60 g de cacao en polvo
- 160 ml de leche
- 120 ml de agua
- 2 cdtas de levadura química
- 1 cdta de extracto de vainilla
- Pizca sal
Para la buttercream:
- 300 g de icing sugar
- 280 g de mantequilla
- 3 cdas de pasta concentrada de menta
Para la cobertura:
- 200 g de chocolate negro
- 50g de mantequilla
Para hacer el bizcocho empezamos batiendo los huevos con unas varillas, no hace falta espumarlos demasiado. Cuando los tengamos batidos, añadimos el azúcar y seguimos mezclando. Una vez los ingredientes estén bien incorporados, añadimos el aceite. Agregamos una cucharadita de extracto de vainilla seguimos removiendo para repartir bien el sabor y cuando lo tengamos listo, añadimos la leche.
Con la ayuda de un colador, tamizamos la harina, el cacao y la pizca de sal. Añadimos también la levadura química. Ahora, removemos la mezcla suavemente para integrar los ingredientes secos. Sólo necesitamos un poquito de paciencia y en un par de minutos tendremos la masa casi lista. Cuando esté bien mezclado, calentamos el agua hasta que empiece a hervir y la vertemos sobre la mezcla con cuidado de no quemarnos. Removemos bien, y listo. Repartimos la masa en los moldes, yo utilice dos de 18cm, y horneamos a 165ºC durante 40 minutos aprox.
Para hacer la buttercream empezamos añadiendo la mantequilla a temperatura ambiente en la batidora y con la pala batimos unos segundos a velocidad media para que se ablande un poquito. Ahora subimos la velocidad al máximo y batimos durante cinco minutos. Una vez batida, añadimos todo el icing sugar. Y cuando ya se haya integrado un poco con la mantequilla, subimos la velocidad al máximo y batimos cinco minutos más. Por ultimo añadimos la parta de menta. Si no encontráis pasta de menta también podéis utilizar menta fresca que lavaremos bien y la picaremos antes de añadirla a la buttercream.
Vamos a montar la tarta por eso igualamos los bizcochos con una lira y los partimos a la mitad. Sobre un plato de cartón colocamos el primer bizcocho y con la ayuda de una espátula repartimos la buttercream. Repetimos este proceso hasta terminar los bizcochos. Ahora colocamos una fina capa de buttercream por toda la tarta y la enfriaremos por unos 20 minutos. Pasado este tiempo ya podremos cubrir la tarta con el resto de la buttercream. Yo decidí dejar las paredes lisas pero ese detalle ya va a gusto de cada uno. Una vez echo este paso volvemos con la tarta a la nevera y dejamos enfriar por 30 minutos.
Para la cobertura solo hay que trocear el chocolate y la mantequilla y lo derretimos todo junto. una vez que tengamos una mezcla homogénea la vertemos por encima de nuestra layer cake que previamente habremos enfriado.
Espero que os guste.
Nos vemos pronto.
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